El té es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo. Hoy en día disponemos de una infinidad de tipos y variedades. Es importante saber que cada té es un mundo y necesita una preparación específica para conseguir un buen sabor y conservación de todas sus propiedades.
En este post hablaremos de cómo preparar el té, aspectos a tener en cuenta para hacerlo correctamente y errores que solemos cometer en su preparación.
Aspectos a tener en cuenta para preparar el té
Es posible que lleves toda la vida preparando el té de forma incorrecta y sin saberlo. Preparar bien una taza de té no es tarea fácil. A continuación detallaremos algunos aspectos que influyen y marcan la diferencia de un buen té o un té del montón:
Agua
Según un antiguo proverbio Chino, el agua es la “madre del té”. De hecho, el agua representa un 95-98% de la taza de té, por eso su calidad tendrá mucha importancia para el sabor final de la bebida. Cuanto mejor sea el agua, mejor será el té. A veces, un té demasiado amargo es debido al agua y no al té, que está compuesta por demasiados carbonatos de calcio y magnesio. Por el contrario, si se trata de un té con aditivos, el agua puede llegar a mejorarlo.
El agua del grifo no es apropiada para preparar té porque contiene cloro, flúor, cal y minerales, que pueden llegar a estropear el sabor de la bebida. La opción más recomendable es usar agua filtrada o embotellada, que sea baja en mineralización para la preparación de todos los tés.
No es recomendable reutilizar el agua que ya se ha calentado previamente, si no utilizar solo el agua recién calentada para conseguir mantener las cualidades y propiedades originales del té.
Temperatura del agua
Muchos expertos afirman que en la temperatura del agua está el 90% del éxito del té. Si el agua está demasiado caliente, el té se pondrá amargo y perderá su aroma y sabor, en cambio, si está demasiado fría, el té no infusionará bien. Por eso, calentar el agua a una temperatura correcta es la clave para conseguir un buen té. La temperatura ideal, aunque dependerá del tipo de té que prepares, siempre estará entre los 70- 100ºC.
Los tés más delicados y suaves como el té blanco o el té verde se hacen a una temperatura baja de 70- 80ºC y el té oolong puede llegar a unos 80ºC. Los tés más aromáticos e intensos como el rojo o negros se hacen con agua más caliente que puede llegar a 100ºC. En el caso del Rooibos la temperatura del agua es de 100ºC. Eso sí, siempre es mejor consultar sobre la temperatura adecuada a nuestra tienda de tés especializada como Bebe-té.
La mejor forma de conseguir una temperatura perfecta del agua es evitar utilizar una tetera, cazo o el microondas y optar por un hervidor, ya que podrás controlar la temperatura adecuada dependiendo del tipo de té.
Tiempo de infusión del té
Calcular el tiempo de infusión de cada té depende de la cantidad de hojas (más hojas, menos tiempo), de sí las hojas están rotas o enteras (más rotas, menos tiempo) y de la temperatura del agua (más temperatura, menos tiempo).
También, de la variedad de té que queramos preparar, y sobre todo, los gustos de cada persona. Por norma general, los tés oolong y negros necesitan tiempos superiores a los verdes. El tiempo de infusión ideal para preparar un buen té es de entre 2 y 3 minutos, después de ese tiempo, el té puede perder aromas, teína, color y sabor.
El té blanco, rojo y verde unos 2 minutos aproximadamente, el té oolong (té azul) unos 3 minutos, el té negro unos 4 minutos y el Rooibos unos 5-8 minutos.
La cantidad de té
En el caso de las bolsitas de té, la cantidad está clara: una bolsa por taza. En cambio, si compramos té a granel aquí pueden surgir las dudas. Para calcular la cantidad exacta de té a granel que debemos poner en una taza, existen unas cucharas medidoras. Si no disponemos de una, podemos usar como referencia una cuchara de postre (es la medida intermedia entre la de café y la sopera).
A pesar de esto, se trata de una opción totalmente personal. Hay personas que les gusta más el té suave, por lo tanto prefieren poner menos cantidad y otras que les gusta el té más intenso, por lo que prefieren poner más cantidad en la taza. Pero recordad, que por más cantidad de té pongamos en nuestra bebida no será mejor.
7 errores que solemos cometer
Cuando preparamos té en casa es muy probable cometer algunos errores que nos impiden que la bebida sea perfecta y de la mejor calidad. A continuación, detallaremos cuáles son los más comunes para que los tengas en cuenta y así evitarlos.
Utilizar té de mala calidad
Es una equivocación pensar que el té en bolsitas tiene la misma calidad que el que se vende a granel. El té en bolsitas, está compuesto por hojas rotas o directamente polvo de té, que hace que amargue antes en nuestro paladar y tenga una calidad inferior. En cambio, el té a granel es considerado un té gourmet y está formado por hojas de gran calidad que mantienen las propiedades intactas.d
Una opción híbrida son las pirámides, es decir, té a granel dentro de una bolsita en forma de pirámide. Suelen estar fabricadas con nylon y actúan como filtro que permite la expansión completa de la hoja y sus frutos, que hacen que su sabor sea más intenso, aromático y de más calidad que las bolsas.
Almacenar el té en cualquier lugar
Tanto para los tés en bolsita como para los tés a granel que tengamos para consumir, es importante guardarlos en un lugar fresco, seco, alejado de la humedad, del calor, de la luz directa del sol y de otros alimentos que puedan contaminar su aroma y sabor. Es recomendable almacenarlos en un envase hermético y bien cerrado para que las hojas no se sequen, oxiden o pierdan sus propiedades.
Calentar el agua en el microondas
El microondas debería ser nuestra última opción para calentar el agua del té. Hoy en día existen diferentes recipientes y formas de calentar el agua, como hervidores, teteras o los clásicos cazos que permiten calentar uniformemente toda el agua y poder controlar mejor el momento en que llega a su punto de ebullición. Si calentamos el agua en el microondas, no llega a hervir, no se calienta por igual y además, es muy complicado controlar su temperatura, ya que deja zonas frías y otras excesivamente calientes.
¡Importante! Un error es calentar el agua con el té dentro. Se tiene que calentar por separado, ya que el té tiene que entrar en contacto con el agua con la temperatura adecuada. Lo ideal es calentar primero el agua y posteriormente verterla en el té que, anteriormente habremos puesto en el infusor.
No precalentar la taza
No precalentar la taza es otro error común. Antes de preparar nuestro té o infusión, es necesario precalentar la taza o la tetera en la que vamos a infusionar el agua y el té. De esta manera, con el precalentamiento evitamos que baje la temperatura del agua cuando echamos el té y así conseguimos un mejor sabor y aroma.
Elección de las teteras, tazas y filtros
En cuanto a la tetera o la taza que utilizamos para infusionar nuestro té, los materiales más apropiados son el vidrio, la cerámica o la porcelana, porque no desprenden aromas y partículas en el agua y por lo tanto no modifican nuestra bebida. En cambio, las de barro pueden dejar cierto sabor a tierra y aunque el hierro se puede utilizar, pero no es el mejor aliado, porque no mantiene la temperatura tan bien como la cerámica.
En cuanto a los infusores o filtros existen de muchas formas (pinza, canasta o flotantes) y materiales (desechables de papel, porcelana, acero inoxidable, silicona o vidrio). Es recomendable evitar aquellos pequeños de tipo bolita, ya que oprimen la hoja del té e impiden que se abra y que pueda esparcir sus propiedades y aroma. El filtro debe tener el suficiente espacio para que las hojas de té puedan expandirse.
Fecha de caducidad
Aunque parezca que sí, el té no dura eternamente. Cada tipo de té y sus variedades tienen su fecha de consumo preferente, y por eso, es mejor consumirlo antes para que no pierda sus cualidades de aroma y sabor. En Bebe-té, en cada una de las bolsitas de té a granel ponemos la fecha de caducidad, que normalmente oscila entre 1 y 2 años, dependiendo de las diferentes variedades.
No estrujar las bolsitas de té
En el caso de las bolsitas de té, es importante evitar estrujar la bolsita con una cucharilla para arrancarle hasta el último líquido o remojar la bolsita metiéndola y sacándola del agua. Al apretar más veces la bolsita provoca que el sabor del té sea más amargo y favorece el aumento de teína.
Pide asesoramiento para conseguir preparar un té perfecto
En Bebe-té disponemos de una gran variedad de tés, tanto a granel, como en bolsitas, de una calidad excelente y a un precio muy asequible. Te asesoraremos sobre todo el proceso de preparación de cada tipo y variedad de té según tus gustos y preferencias. Además, disponemos de una gran selección de complementos idóneos para su elaboración, como tazas, teteras, termos o infusores. ¡Ven a conocer nuestra boutique!
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