Nuestro auténtico Matcha orgánico proviene de Japón, más precisamente de la prefectura de Kagoshima, en el sur del país. Kagoshima se encuentra en la isla japonesa Kyûshû, donde se encuentra el parque nacional Kirishima. Es el hogar de 23 volcanes que proporcionan un suelo fértil rico en minerales. En combinación con el clima cálido y húmedo, estas son las condiciones perfectas para el cultivo y la producción del mejor Matcha.

Solo el té más puro, tencha, se utiliza para la producción de Matcha. Tencha significa el «té del cielo» y es la carne pura de las hojas superiores de la planta del té.  Hasta 2 semanas antes de la cosecha, las hojas de té se cubren con redes a prueba de luz. Compensan la falta de luz con una intensa producción de clorofila y aminoácidos, que son los responsables del color verde brillante y de los valiosos nutrientes del Matcha.

Los cultivadores de té con los que trabajamos no son agricultores ordinarios. Son maestros creativos del té.

Nuestro importador conoce a todos los productores de té en persona, estando familiarizados con cada campo de té y cada fabricante. Cada uno de nuestros agricultores posee de 5 a 10 campos de té y se preocupa apasionadamente por el crecimiento de las plantas y siguen la tradición de más de 700 años.

PRODUCCIÓN DE MATCHA

Cada primavera esperamos ansiosamente la primera cosecha de las hojas de té más jóvenes y frescas. A partir de abril, los cultivadores de té las recogen y las llevan a los pequeños productores conjuntos de té cercanos. El procesamiento inmediato de las hojas es crucial y la base de un buen matcha ya que la fermentación de las hojas de té debe detenerse lo antes posible. Esta es la única manera de preservar su color verde brillante y los valiosos nutrientes.

Después de ser cocidas al vapor, las hojas se dejan secar a 180 °C.

Posteriormente, las hojas de té secas, también llamadas Aracha (té crudo), se seleccionan según el grado. Los catadores de té profesionales califican las hojas según el color, la textura, el sabor y la calidad.

Antes de moler, se eliminan todos los tallos y venas de las hojas de té. Solo el té más puro, la pulpa de las hojas, se muele en molinos de piedra de granito hechos a mano. Un molino de piedra solo muele unos 30 g de Matcha por hora. Este método de molienda complejo y cuidadoso es la única forma de preservar por completo los valiosos nutrientes, el color y el sabor del Matcha.

Ten en cuenta que el Té Matcha es un producto de gran calidad, por lo que siempre te recomendamos que lo compres en tiendas especializadas como Bebe-Té

y ¡Que no te engañen!